A tenor del optimismo del
gobierno por este decrecer sin precedentes del desempleo, que nos pone a la
cabeza de la recuperación económica de Europa, me he planteado cuáles son las
empresas más punteras de España. Ha sido un gran reto.
Tras contrastar exotéricos datos
macroeconómicos y vanguardistas teorías de sesudos economistas, he ido
descartando sucesivamente: la investigación, la tecnología, la medicina, la
farmacia… y hasta, con dolor, el mismísimo deporte. Y, finalmente, me he caído del
guindo. Nuestras empresas más avanzadas y punteras son: la Semana Santa, la
Navidad, la Semana Blanca, los carnavales y el mes de agosto.