Tus piececillos son zarzas
que acarician mi memoria
y al rozarlos por la noche,
sin descanso,
me acuna un amor de novia.
Tu piel me huele a suspiro
y tu aliento a hierbabuena
y te miro cuando duermes,
sin descanso,
como el sol mira a la arena.
(Cosas breves ≤ 100 palabras) + fotos propias (La poesía, como salga)