Creo que la tristeza es esférica
y no se llena nunca ni revienta, por más que siempre crezca y nunca mengüe. Es
una burbuja que permanece dentro y cada día, cada mes y cada año se adensa con
otras concéntricas a ella. Los psicólogos forenses, llegará un día, en que
sabrán extirparla de las entretelas de los muertos. Verán entonces que la
historia de cada vida está escrita en ella. Hasta entonces, sólo sabremos que
puede notarse en la mirada, porque los ojos son también dos esferas.
29 de abril de 2014
28 de abril de 2014
Entrando en la postguerra
Para los parados, crearemos
trabajos; para los pobres, habrá riqueza; para los defraudados, obraremos
justicia; para los desahuciados, habilitaremos cobijos; para los enfermos, remedios
y galenos, y para los que aún no tengan
problemas, no tardaremos en proporcionárselos. Porque no se puede hacer todo a
la vez y, además, las crisis sirven para eso: estropearlo todo y luego ocupar a
la gente en vindicarlo y resolverlo en un montón de años. Ciclo económico se
llama.
-
¿Saldremos de ésta?
-
¡Dios quiera que mi gallo salga bien de ésta, todos los
picotazos van a la cresta! –dijo la abuela con mucho retintín.
26 de abril de 2014
Disfunción de la vida interior
Anduve por el campo de perfiles
perennes pensando en tropezar, a falta de nuevos horizontes, con esa silueta
interior que, a fuerza de arañar pacientemente el pensamiento, dicen que se
descubre. Pero nada. Pensé hasta en decorarme con un nuevo interiorismo vital que me facilitara
la posibilidad de amarme intensamente que, según dicen, es cosa imprescindible y
trascendente. Y hasta ponderaba ya sobre la audaz posibilidad de reinventarme, que
es tendencia, cuando descubrí aquel tocón desnudo con sus pliegues. Hice una
foto y, dejando de lado las banales e interesantes sutilezas modernas, me marché
como vine: caminando como un ser corrientito.
La adolescencia del año
La primavera es lo opuesto a lo
que antes vendían los poetas y, ahora, El Corte Inglés. Nada hay de la bonanza
soleada y fresca, nada de templados y serenos días azules con piar de pajaritos
y arrullo de palomas. Al contrario: tormentas violentas, vientos cambiantes,
aguaceros, temperaturas locas, confusión en la cúpula del cielo, nubes negras
con nervios de electricidad en las entrañas, destemplanza y brusquedad. Los
poetas describen sólo algunos intervalos estables, y dan a esta estación muy
buena fama, pero la primavera es la adolescencia del año y su meteorología es imprevisible,
caprichosa, desequilibrada, contradictoria y turbulenta.
25 de abril de 2014
La extraña utopía
Homogeneizada la izquierda y la
derecha en esta ortodoxia del bipartidismo, lo demás es extremismo peligroso. Peligroso
para la verdadera democracia, catalizadora de esta libertad que nos inunda. Y defendiendo
esta libertad igualitaria, toda molestia a los políticos, si no lo es ya, será
delito en poco tiempo. Y quien tenga una queja habrá de ser tan educado al
exponerla que, si alza el tono, podrá multársele en el acto y pasará a prisión
si persevera. Manifestarse será promover la violencia y mostrar desafecto al
sistema será llamado alta traición. Parecía imposible, pero tenemos a un paso
la utopía.
Externalización inminente
La imprevisión del Gobierno es
alarmante. No tener prevista una externalización de los servicios
penitenciarios es suicida. La inminente entrada en prisión de personas con
elevado poder adquisitivo hace imprescindible la creación de unos servicios
mazmorreros de, al menos, cinco barrotes (***** de establecimientos
penitenciarios) para personas de sofisticada cualificación delictiva.
Hasta ahora se ha venido paliando
la inexistencia de este servicio, obviamente privado y a la carta, con el
indulto, pero la situación ya es insostenible. No es viable que un servicio
público pueda universalizarse para tantos granujas con posibles. No podemos
seguir viviendo por encima de nuestras posibilidades.
24 de abril de 2014
¿Opciones o posibilidades?
(Foto a la atención del Beato)
La senda de la incertidumbre se
hace larga porque se recorre bajo el peso agobiante del temor ciego; la de la
felicidad, se hace liviana pero efímera, porque se pierde con la misma
inesperada prontitud con que aleatoriamente la encontramos. Pero, por ambas, se
ha de transitar, porque la vida no ofrece caminos optativos y, aunque a veces
creamos haber escogido libremente nuestro sino, aquello con que vamos topando
con el tiempo nos sugiere siempre una idea de servidumbre inesperada, de culpable
temor a lo desconocido y de no entender muy bien, en definitiva, qué pintamos
aquí.
20 de abril de 2014
La piedra
Pasan los años y a la piedra del
Pizorral le ha nacido liquen de colores y la tapó de blanco la nieve muchas
veces y la noche de enero la recubrió de hielo y las aguadas de la primavera la
empavonaron al amanecer de escarcha y el agua de los cúmulos negros la lavó y
el arroyo la tapó en sus avenidas y el sol del estío la templó en los agostos,
pero tengo la ilusión, algunas veces, de que el tiempo no podrá con ella,
aunque, mal enemigo, pueda algún día con nosotros.
Firme compromiso
-
¿Crees en Dios o en el Cristo de tu pueblo?
-
Hombre, viene a ser lo mismo.
-
¿Crees en la política, en los políticos o en los
partidos?
-
Hombre, ¿qué diferencia hay?
-
¿Crees en la Iglesia, en el clero o en el Papa?
-
Es el mismo lote.
-
¿Crees en la economía global o en el trabajo personal?
-
Son cosas unidas.
-
¿Crees en la protesta o en la resignación?
-
Según convenga.
-
¿Abortista o antiabortista?
-
Difícil decidir. Mucho me comprometes.
-
¿Del Madrid o del Barça?
-
Hombre, del Madrid de toda la vida. Que yo al pan, pan
y al vino, vino.
10 de abril de 2014
La verdad os hará temerosos
Pensaba cuál sería la canción más
triste. Indagaba sobre el dolor más agudo. Buscaba el lugar más solitario.
Imaginaba la maldad más perversa, la crueldad más atroz, el cinismo más cruel,
la locura más inhumana, la insensibilidad más pétrea, el asco más vomitivo, el
desamor más infausto, la dolencia más incurable, la melancolía más triste, el
olvido más profundo, la infamia más injusta y ominosa. Pero carecía de
imaginación, porque las noticias diarias dejaban corto, pacato y obsoleto
cualquiera de sus pensamientos. La globalización de la ignominia sobrepasaba
cualquier pensamiento individual. La felicidad era librarse del presente. Pura
omisión ciega.
3 de abril de 2014
¿Dónde yacen las palabras?
No había agua en las casas,
tampoco teléfono, luz sólo por la noche. La televisión no existía.
-
¿Ordenadores? ¿Internet?
-
¿Mande?
Jugaba en un barrio oyendo las
bigornias, con casas de adobe en las que había alacenas, vasares, orzas,
artesas, jofainas, alcuzas, fallebas en balcones y ventanas y pozos con
cangilones. Mi abuela llevaba toquilla y nos servía, alguna vez, una miaja de
chocolate en jícaras. Teníamos brasero con badila. Mi madre me regañaba por
venir de la calle con cascarrias.
El tiempo me arrebató personas y
palabras queridas y, a cambio, me va vendiendo cachivaches modernos y me regala
barbarismos.
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