¡Papo, qué vicio cogí! ¡Cómo me engolosiné! Y es que no paraba. Ya lo decía el tío Canano: “Afloja un poco, chacho. A ver si te nos vas a encanijar.” Pero yo, que nada, anda que menuda fijación que yo tenía. Y qué vergüenza cuando tuve que enseñarle mis partes al médico del pueblo. Y él, que se percató: “No penes, galán, que esto es de hombres.” Y, pasada la primera vez, eso me animaba. Lo que me faltaba, además de aquella tía tan camaleona.
- ¿Es que te engañaba?
- ¿Estás tonto? Cama, leona. ¡Huy qué cultura tenéis en tu pueblo!
10 comentarios:
...Más claro, agua...
Forma precisa, y clara, de hablar en clave, encabalgando para que "naide" se de por enterado/a...
pues yo no lo veo tan claro... ¿me explicas?
¿qué vió el médico exactamente?
lo de camaleona sí que lo entiendo pero lo otro no.
biquiños,
Gracias, Anónimo. Pero el que lo dijo creía lo que decía.
Que el interesado había acabado con una purgaciones, dado su interés indiscriminado en la materia. Pero el médico de su pueblo, que era mucho más putero que él, no sólo le quitó la vergüenza sino que le animó porque "eso" era cosa de hombres. Como quien dice: gajes del oficio.
Bicos, Aldabra.
¿Y no?
(¿no era/es cosa de hombres?)
Abrazo
...Doctor, hice lo que me recomendó para los ardores...
y ahora, tengo LADILLAS.
- ¡Te dije, SAL DE FRUTAS!....
¡¡¡¡ de
FRUTAS !!!!!
Lan, qué punto?, qué anónimo/a?, qué leches?...
Lan, qué punto, qué anónimo/a, qué
bueno...
He aquí la respuesta a sus males..jeje
Breves
Tanto como de mujeres, Insumi.
:-)
Vale, vale, Beato, no te alteres.
Era lo que me imaginaba la verdad pero me dio apuro decirlo por si metía la pata.
y gracias Sr. Maestro Lan.
:-)
biquiños,
Aunque te hubieses equivocado, los que vienen por este blog son todos de casa y nadie se corta.
Bicos, Aldabra.
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