El otro día por la tele uno de
esos señores importantes, que trabajan en el Ministerio de Sanidad, dijo que
iban a ser especialmente pro activos, o proactivos, en las medidas para
combatir el ébola. El saber que el ministerio va a estar en favor de la actividad
ante esta enfermedad me llenó de tranquilidad.
Sin embargo, pasado un rato, me
dije si es que antes estaban pasivos, o pro pasivos, o propasivos y pensé que
solamente habían usado una expresión nueva o poco frecuente, pero que seguirían
como siempre, y, además, propasándose también en el uso del lenguaje.
6 comentarios:
Las palabras que se propagan por el viento se expanden como el propano, vengan de mengano, zutano, butano o de fulano que con sus juicios de valor echan por tierra las promesas que jamás cumplieron, ni cumplirán.
¿Con qué propuestas nos vendrán ahora estos desgraciados? :|´
Me acuerdo de aquello de "una palabra tuya bastará para engañarme". ¿O no era así?
No lo sé, Anónimo. Pero sean cuales sean las circunstancias, ellos se inhibirán de todo.
Gracias por tu comentario y un saludo.
Sí, y según estas personas, también puede engañarse proactivamente.
Saludos, Ángeles.
y no viene en el diccionario de la RAE
:)
A los políticos eso, como todo, les da igual. El caso es modelar con palabras inventadas las realidades que cambian a su antojo.
¡Qué cruz, señora!
Abrazos, Zeltia.
Publicar un comentario