31 de diciembre de 2013

Nudos gordianos

El último día de cada año suscita, especialmente a determinadas edades, la idea,  ya imposible, de realizar lo que en su momento no se hizo. Sin embargo, lleva también a entender cosas que, ni las circunstancias ni los hechos, te permitieron comprender en su momento. Así, el tiempo convierte las conciencias en balanzas equilibradas entre lo que deseaste hacer y no hiciste, y entre lo que ignorabas y ahora entiendes. Es el arqueo anual de las cuentas personales entre la pasividad ante los hechos y el entendimiento de los mismos. Por eso los nudos de la vida suelen ser gordianos.

2 comentarios:

Ángeles dijo...

Interesante equilibrio, sí. No todo va a ser negativo en lo de cumplir años (que no es lo mismo que envejecer).
Pero mira lo que dijo Mary Ann Evans, alias George Eliot: "Nunca es tarde para ser lo que podrías haber sido".
Y yo lo creo.
Siendo realistas, claro.

Lan dijo...

La frase es bonita pero, tal vez, un poco decepcionante en una mujer que tuvo que adoptar un nombre de varón para que le hicieran caso.
Saludos, Ángeles. Recordaré la frase.