25 de abril de 2014

La extraña utopía

Homogeneizada la izquierda y la derecha en esta ortodoxia del bipartidismo, lo demás es extremismo peligroso. Peligroso para la verdadera democracia, catalizadora de esta libertad que nos inunda. Y defendiendo esta libertad igualitaria, toda molestia a los políticos, si no lo es ya, será delito en poco tiempo. Y quien tenga una queja habrá de ser tan educado al exponerla que, si alza el tono, podrá multársele en el acto y pasará a prisión si persevera. Manifestarse será promover la violencia y mostrar desafecto al sistema será llamado alta traición. Parecía imposible, pero tenemos a un paso la utopía.

2 comentarios:

Ángeles dijo...

Pero, ¿y lo bonito que es hablar con miramiento y sin aspaviento? "Oiga, señor ministro, vera usted, es que me molesta un poquitín la precaria situación en que me encuentro. No, a ver, que no quiero yo ser impertinente. Que si hay que morirse de hambre, se muere uno y ya está, no nos vamos a pelear por eso."

Y es que la educación no está reñida con la reivindicación, ¿no?

Lan dijo...

Claro, claro, Ángeles, y a la gente a la que han robado educadamente, no se le debería permitir propasarse.
- Oiga, que a usted le han robado con muchísima educación, haga usted el favor de no extralimitarse. Orgulloso debería usted estar de que le hayan robado personas de carrera, hombre.
Si es lo que digo, Ángeles, llegando estamos a la utopía. :-)
Saludos.