28 de enero de 2011

Regocijo en el Gobierno

Tras quince años en la construcción está en el paro. Está pagando un piso, un coche y se casó. Tiene dos hijos. Su vivienda, a la venta, no le da para rescindir la hipoteca. Y, aunque le diera, ¿dónde viviría?
Su amigo de la infancia estudió. En esos años acabó dos carreras. Tampoco tiene trabajo. Vive con sus padres.
Gobierno, empresarios y sindicatos acuerdan la edad de jubilación a los 67, y suben los años de cotización. La oposición dice que estamos en el buen camino.
Todos se felicitan, pero los parados no saben por qué. Ni yo tampoco.

4 comentarios:

Metalsaurio dijo...

Todos se felicitan porque su gremio, el de los políticos, sigue saliendo bien parado.

Un saludo.

Lan dijo...

¿También tú tienes la impresión de que viven sólo en su su mundo?
Saludos, Metalsaurio.

Ángeles dijo...

Es que no nos queremos dar cuenta, pero el gobierno lo hace todo por aquello de la igualdad. Igual da que hayas estudiado o que no; igual da que seas hombre o mujer, joven o viejo... aquí todos somos iguales en la falta de trabajo, de perspectivas, de esperanza... No sé qué más queremos...

Lan dijo...

Puede que al final consigan que todos acabemos tan tristes como ellos desnortados.
Creo, Ángeles, que, desde que vino la democracia, no he visto tanta resignada desmoralizacón en la gente. A los gobernantes prefiero no mencionarlos.