Abel Paz eligió el nombre del
primer hombre bueno asesinado y un apellido tan conciso, preciso y armonioso
como amplia, general y bastardeada es la idea que contiene. Él podía hacerlo
porque era anarquista y pensaba que la Humanidad no necesita gobiernos, jerarquías,
autoridades, policías ni ejércitos, y las personas, enclavadas en la Naturaleza,
no necesitan ninguna de esas entidades para estar, como los otros seres, en
comunión con ella. A la vista del desastre de nuestro sistema de vida, me
pregunto si Abel Paz no tenía razón. Llevamos demasiados siglos encomendando
nuestras vidas a los clanes de Caín Guerra.
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4 comentarios:
"Abel Paz" y "Caín Guerra"
Si terminan como la historia bíblica, ya se sabe el final... ojalá lo reescribieran.
Saludos contentos
Para que el ideal de Abel Paz funcionara tendríamos que ser todos Abel, cosa que no puede ser, porque somos humanos, o sea, Caín y Abel todo en uno, en proporciones variables.
Teóricamente, Insumisa, los humanos somos dueños de nuestro destino. Al menos, eso nos dicen cada día. ¿Por qué no intentarlo?
Aunque, quizás, nada de lo anterior sea cierto y, como pensamos algunos, siempre nos engañan. Jamás lo permitirían. Sin embargo, Abel Paz existió e hizo su intento.
Abrazos.
También, Ángeles, somos igual de humanos en el caso contrario y, sin embargo, las consignas de los Caín Guerra llevan siglos rigiendo el mundo y se presentan como irrebatibles e irreemplazables. ¿No nos estarán timando?
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