19 de agosto de 2015

Los ríos niños

Los ríos, cuando nacen, son niños juguetones que bajan de los montes riendo entre las piedras. Son colaboradores, pequeños y eficaces y no paran de fundirse unos con otros. Pero a medida que disminuye la inclinación de su pendiente pierden las ganas de jugar y el alborozo. Ganan caudal y amortiguan su ruido. Y discurren ya casi silenciosos, como si se volvieran taciturnos, hasta que se diluyen mansamente, perdido todo empuje, en la raya invisible que los adhiere al mar.
Y queda para siempre el canto de los ríos niños en la acogedora vejez de las montañas paridoras del agua.

11 comentarios:

d:D´ dijo...

Algunos, retoños de la lluvia, son su alborozo eterno que aún las golpea, repicando incesante, dejándose caer entre dentelladas de esquistos, granitos, calizas. Otros respuesta mansa de la lenta agua que la nieve filtró a sus e(x)ntrañas parideras; sin olvidar a aquellos que gozan del juego torrencial juntándose a limpiar arenas de las faldas de sus madres. Aunque algunos van y vienen pródigos..., cuando aparecen, risueños, siempre hay quien dice que los más listos, esos muy inquietos, hiperactivos, descienden vertiginosos directamente. Son una cascada de sensaciones directas en caída vertical y muerte. Clavadistas macho. Macho...Por el norte hubo uno así, Ézaro; lo tuvieron retenido por -bravo, desafiante, rebelde- su potencial eléctrico. Loco como un calambre del tío aquél, voltaje en potencia, río en acto...corto, de corto acto, de antreacto. Sainete y burla al agua. Y, luego, sufrimiento en camisa de fuerza que asfixió su intensa y corta vida recorrida pero intensa. Vívida fuerza de tesla o supernova.
Abriendo otros, en juicio, por sentencia, soltaron uno de sus brazos y arrancándose a-saltar su propia muerte de lado...Aún hoy, en un extremo de su cuerpo, un brazo agita su turbu(i)lento y tolo cauce acer(t)ando clavarse al lecho del mar galaico, en hora punta.

Pocos son los que habiendo nacido viajan y se expanden volando en deltas interiores. No conocen la mar de cosas; pero no por ello dejan de ser producto bravo de montañosas diosas de pétreos senos.

Comprimidos o embalsados los retienen en (como) recreos y patios de piragüistas, lanchas y pescadores de costumbres que les arrebatan la vida engordándolos. Panzas de cinturones de hormigón que retienen memoria pero no olvidan. Luego late en ellos ese potencial que riega y electrifica hogares para asar en parrillas sus productos tiernos de proteínicas musculaturas a ritmo de trainera de agua dulce.

Viajan limando limos que eyaculan en orillas al ritmo de los cantos de la ondas marinas; cantos de sirena que representan su desgraciado fin y muerte; aunque aguas arriba, zumbando exhaustos, he visto salmónidos enfermeros que les curaban las cicatrices en los mismos parideros de los que parten ambos, río naciente y peces o bichos. Toda una alegría al encuentro pues los que retoman esta costumbre es que siguen vivos...

Solo o sólo en caravelle hay taravillas serranas que dan lugar a remansos transparentes de juncos y espadañas o carrizales que como testas humanas, son cabeceras. Y aún aguantan frescas rigores de verano.

Incansables son viejos, cauces, renovando su intangible hidropiel cual filósofo predijo imposible bañarse dos veces en el mismo.

O algo sacaremos en claro...

Saludos.

d:D´ dijo...

...En las mismas parideras, está mejor escrito...

Lan dijo...

Me reitero en lo dicho. Eres un prestidigitador con el idioma. Me paso la vida racaneando con las palabras, siendo un avaro con ellas para no gastar más de cien a la vez, pero tú me devuelves comentarios sin tasa y sin medida, como si tuvieras tantas guardadas que te gotean del saco que de ellas acarreas.
Gracias por tu generoso derroche, siempre me avasallas. :-)
Saludos d:D'

d:D´ dijo...

Entonces estamos a muerte o a saco. Saco la faca de la saca y digo que usted me gana por escueto y concepto; inteligente quevedo.
Yo por extenso, prolijo, te(o)dioso, culteranista y retórico dejo para quienes saben escribir condensado y corto.
Aunque en este caso no haya rivalidad
Sólo es hablar por escribir.
[Los otros, los escritos cortos me los suelo guardar...y no sé muy bien el porqué. Pocos publico]
En su caso, cuando le comento es más por motivación mental no vaya a ser que de aquellos años en Alcalá me pasen factura ya que ambos recibimos unas hostias, nada más llegar, o eso me pareció leer en su momento; producto de la filiación entre ignorancia y brutalidad a partes iguales.

El concepto siempre será el concepto y en eso es maestro.
Así que seamos honestos, el avasallado soy yo aunque no crea en reyes ni sirva a cerdotes, o viceversa.

Saludos

Ángeles dijo...

Qué bella y manriqueña alegoría, señor Lan.

Lan dijo...

Coplas a la muerte de su padre, de obligado aprendizaje en aquel viejo plan de estudios. Martilleo de toda una vida. ¿Y quién le lleva la contraria?
Saludos, Ángeles.

Paz Zeltia dijo...

Me gustó mucho este texto poético. Y muy acertadas las comparaciones.

Paz Zeltia dijo...

Beato es mucho en sus comentarios. si, si. prestidigitador de las palabras.

Lan dijo...

Gracias, Zeltia. Ya veo que de lo de Beato tú también te has dado cuenta. Lo de este hombre es infrecuente e inefable (o casi).
Saludos.

Anónimo dijo...

Precioso, me encantó.
La poesía también te sale muy bien.

Soros dijo...

De vez en cuando, Paloma, se me ocurre algo.