4 de octubre de 2014

Torrente 5, piqué.

So pretexto de hacer una metáfora de los vicios nacionales, se estrenó ayer el quinto episodio de Torrente. En mi opinión, visto el primer episodio de la saga, vistos todos. Que tantas personas, incluso críticos, promocionen este quinto Torrente, produce la triste impresión de que, considerándonos acostumbrados a los escándalos diarios, piensan que no nos importará contribuir, en este caso voluntariamente, a la avidez monetaria del amiguete Segura, así, en plan coleguitas. Menudo bodrio, no sé cómo los hay con tanta jeta. Menos mal que en el cine, al contrario que en la vida, tragarse una vergüenza es cosa voluntaria.

1 de octubre de 2014

La irrealidad de la noche

Confiaban los ciudadanos en la sempiterna sucesión de los días y las noches. Mas hubieron de desengañarse, como de tantas cosas tenidas por evidentes e inmutables, cuando un día los políticos les revelaron que no había noches, sino que la Tierra, al girar, les sumía en lo que propiamente eran eclipses de sol autogenerados de duración variable y que, por tanto, eran los ciudadanos los que, también en este caso, como en tantos, estaban confundidos y ofuscados. Y es que lo real es tan etéreo que no está, estará ni estuvo nunca, más que al alcance de algunos seres superiores.

28 de septiembre de 2014

Antisistema

El partido opositor le dijo al partido gobernante:
-        Deseo que tu política fracase para que los ciudadanos me voten a mí.
-        ¿Y cómo gobernarás tú?
-        Igual que tú.
-        ¿Entonces?
-        La idea es que tú caigas, sin yo hacer nada, y que, sin hacer nada, me pongan en tu lugar.
-        Pero, pasado un tiempo, a ti te sucederá lo mismo.
-        Claro, y entonces volverás a gobernar tú.
-        ¿Creerán en ese juego los ciudadanos?
-        Sí, siempre que, públicamente, sigamos insultándonos. Tanto les apasionaremos, que nos levantarán alternativamente siempre que caigamos.
-        Pero, ¿y si surge otro partido?
-        Intolerable. Eso sería una subversión antisistema.

Me mata la duda

Podados en España aquellos inoportunos brotecillos de la justicia universal y olvidada la machacona retahíla esa de los derechos humanos y otras menudencias, se ha ido don Mariano a la China comunista a hacer negocios. Sumiso ante un régimen tan democrático y humano, les ha abierto un país de grandes ocasiones, el nuestro, para la inversión, garantizándoles que no verán la luz esos odiosos y molestos contenciosos contra los prebostes de la gran potencia. Y luego se oye por ahí que los de Podemos son bolivarianos. ¿A ver si, a estas alturas, nos va a salir un PP filocomunista?

19 de septiembre de 2014

Adiós mi España querida

Se puede querer a un tonto por humanidad, pero a un bruto se le desprecia  por la misma razón. No sé si mi país es maliciosamente bruto y medio tonto.
Cuando muchos jóvenes se van, decepcionados por una nación que parece no necesitarles o, tal vez, animados por ese espíritu aventurero laboral y cultural que alaba alguna ministra, me pregunto qué sentirán hacia España.
Imagino que, desde fuera, guardarán hacia su patria el cariño que, por ser de ley, se le tiene a un hijo tonto, o el amor incondicional que profesamos a aquella primera novia, aunque nos saliera puta.

3 de septiembre de 2014

Spanish brand

-        En España no se nota la pobreza.
-        Pues la hay, aunque no abunde aún la miseria.
-        ¿De dónde es usted?
-        Soy español.
-        ¿De verdad? –y los holandeses se miran extrañados de que esté en su mismo camping y de que me defienda en inglés.
-        ¿Jubilado, tal vez? – preguntan con ironía.
-        Sí, en España después de cotizar 41 años aún podemos jubilarnos.
Los holandeses me desean un buen día y se van sonriendo, escépticamente, pensando que el único español que hay en este humilde camping del interior de Castilla, repleto de extranjeros, les está mintiendo. ¿Cómo no?

30 de agosto de 2014

Adiós, agosto amarillo

Quebrada como algunas piedras quedó la vida de muchas personas por esos desarraigos prometedores a que obligó el perjuro progreso. En Bilbao, en Barcelona, en Madrid, o vaya usted a saber dónde, hubieron de buscarse un sucedáneo de la vida normal, que fue la que heredaron de sus padres.
Ahora reverdecen en sus pueblos durante esos agostos anuales en los que vuelven como cansadas aves migratorias y no es extraño escuchar frases como ésta:
-Ya lo tengo yo hablao con la mujer. En cuanto faltemos uno de los dos, yo me vengo al pueblo.

7 de julio de 2014

Intuición espiritual

-        De los mosquitos, lo que más me molesta es su sonido.
-        Claro, por eso les llaman trompeteros.
-        Y no comprendo como, si viven de picar y sorber sangre, se delatan con ese zumbidito enervante. ¿No les basta con picar? ¿Han de ponerte además de los nervios?
-        El zumbido no tiene que ver con su alimentación, sino con su manera de anunciarse para buscar sexo.
-        Acabáramos. Ahora comprendo a esos adolescentes de mi barrio que se pasan el día dando por saco con las motitos esas del escape libre.
-        Gran comparación. Demuestra usted una gran intuición espiritual.

La indisciplina del voto

La inesperada indisciplina del votante ha movido ese tú y yo, sillón del bipartidismo. Algunos pasajeros desdeñan ese tren, con una locomotora en cada extremo, que, por idéntica dirección, les cambia alternativamente de sentido. Con vaivenes tan sobados, es difícil cambiar de sitio. Y, bastantes, están hastiados de tanto zarandeo.
Andan mirando si, con maquinistas nuevos, se olvidará el asunto. Pero me temo que lo denigrante son los viejos usos, el trayecto obligado, las paradas imprevistas, las vías muertas, las demoras, los abusos, las trampas. Y dudo de que, simplemente con jóvenes semblantes, vayan a conformarse esos usuarios tan escarmentados.

6 de julio de 2014

¿Para cuándo la mendicidad?

Palabras como pobre, mendigo y pordiosero no son sinónimas. Para empezar, pertenecer al primer grupo no requiere pedir. Mendigos y pordioseros piden. El mendigo pide limosna y el pordiosero la implora por Dios. En un país serio como el nuestro no se puede ignorar esta obviedad y no parece responsable que tales actividades no contribuyan a elevar nuestro PIB. Si ya hemos incorporado a él los ingresos por prostitución y drogas, a qué esperamos para incluir la mendicidad. Por favor, un poco de coherencia, seamos un país serio. La mendicidad es otra fuente de riqueza. ¿O es que estamos ciegos?

ABC de la justicia

No os empecinéis en la justicia. La justicia, igualitaria y rigurosa, es fuente de ciudadanos ofendidos. Porque de esta justicia, como idea, todos son partidarios, pero su aplicación individual a todos disgusta. Lo estamos viendo. Seamos realistas y adaptemos la justicia a cada cual, al rey lo del rey, y, del rey abajo, lo mismo con los demás.
Ya lo dijo Ulpiano, que veía venir las cosas: "La justicia es la constante y perpetua voluntad de dar a cada uno su derecho". Pues nada, que nos empeñamos en enmendarle la plana. ¡Qué calvario, mon Dieu! ¡Cuánto daño hizo la Revolución Francesa!

Cursos de verano

Ya no hay partido político sin su curso de verano. Todos ellos presentan algún líder joven. Olvidando la campanuda responsabilidad de estado, idílica característica del bipartidismo asentado, todos se han lanzado en tromba a la piscina estival de los proyectos. Quieren regenerarnos de sus propias vergüenzas. Al ciudadano le pillan por sorpresa esta legión de socorristas y casi le asustan. ¿Conseguirá este despliegue de celo alguna cosilla?
La idea se utilizó hace más de 30 años para reciclar a los profesionales de la educación y, al poco tiempo, las escuelas de verano pasaron de ser promocionadas a proscritas. ¡Menudo peligro!

15 de junio de 2014

Marca España

Cuando se levantó y apenas notó los efectos de la resaca, se encontró con fuerzas para el cambio.  Decidió no aplacar sus nervios con la violencia habitual. Cancelaría la partida. Apagó la pantalla del ordenador donde los malvados nazis y sus engendros del “Return to castle Wolfenstein” le esperaban.
Conectó la tele justo tras el penalti: ¡Marcaaaaaaa Españaaaaaaa!
Luego vinieron los cinco goles de los otrora nuestros Países Bajos. Su ilusión por el cambio se frustró y volvió al refugio de Wolfenstein.
Si caíamos ante Chile, caeríamos ante un país hermano y no ante un promotor de la Leyenda Negra.

28 de mayo de 2014

Ausencia

Al amigo no tiene sentido alabarle antes ni después de muerto. Del amigo desaparecido queda el recuerdo de su constancia en el afecto. Un desequilibrio en la palanca que tantas veces nos ayudó a equilibrar la vida. Un apoyo al que ya no podremos recurrir, aunque, inconscientemente, no queramos hacernos a la idea. Y durante muchas semanas nos sorprenderemos pensando en ir a verle, como solíamos, a contarle nuestras cosas y a escuchar las suyas. Tendremos ese impulso a menudo para, al momento, pararnos en seco y recordarnos a nosotros mismos: ya no está. Pero, aún así, nos dolerá creerlo.

Vapor


Recorro la estepa que estaba cuando vine y permanecerá cuando me marche y viene a mí el recuerdo, puro vapor de tiempo.

Podemos

Hace más de treinta años mi comunidad plantó un naranjo que inicialmente todos cuidamos con esmero. Pero pronto delegamos su cuidado en administradores y éstos en multitud de jardineros. Mas, ante la confianza del vecindario, jardineros y administradores se volvieron cada vez más descuidados, venales y soberbios. Y, sin cuidarlo, daban por sentado que el árbol era suyo.  Así, lo invadieron pulgones, proliferaron en él bacterias y tumores, y el Virus de la Tristeza lo defoliaba y dejaba sin frutos. Un día algunos vecinos decidieron afrontar la situación y se dijeron: “No hay más remedio, si hay que podar, podemos.”

19 de mayo de 2014

Alegría, que no es un sufragio de difuntos

Elegimos al gobierno por sufragio, luego le sufragamos sus gastos y hasta, frecuentemente, le hacemos los deberes, porque el gobierno ha de estar a lo de la macroeconomía y no a trivialidades rastreras que afecten al día a día de los ciudadanos. El gobierno resolverá el futuro, que el presente es cosa nuestra y, además, no tiene arreglo. De la herencia recibida  hemos de pedir cuentas al gobierno anterior, que a este gobierno ya tendremos tiempo de agradecerle lo mucho que está haciendo por nosotros. El presente ya lo hemos perdido, ahora vamos a jugarnos el futuro. ¡Con alegría, coño!

El círculo virtuoso

Creo que hay situaciones que son ollas a presión de comportamiento impredecible. Mezclas de poder, ambición, intereses propios y ajenos, dinero, favores, amenazas, despotismo, desprecio, odio, estructuras públicas corruptas, política, armas, negocios, lumpen, gente atildada y elegantes salones. El asesinato se rehuye, bien sea por negocio o venganza, pero su sombra está. Siempre creí que las personas de bien no entraban en estos círculos viciosos pues, por definición, nacen o, al menos, viven abonadas a círculos virtuosos, pero creo que la separación entre unos y otros es muy tenue. Eso pensaba anoche, cuando volví a ver El Padrino.

17 de mayo de 2014

Hood no, pero Look sí

El Ministerio de Hacienda español ha recibido diplomáticas indicaciones por parte de la UE para que sus inspectores visiten esta óptica. No pretenden las autoridades comunitarias la utopía de que estos amables funcionarios sisen a los ricos en favor de los pobres, pues eso contravendría el espíritu de la mayor parte de las directrices comunitarias. No quieren que sean como Robin Hood, que ya se sabe que era un proscrito, sino que, contagiados del nuevo espíritu Robin Look, miren y detecten los grandes fraudes y evasiones fiscales. Por una administración escandalosamente económica: Help us Robin Look!

No empecinarse

La felicidad está rodeada de alambradas. Puede que, además, sea sólo un deseo o una ilusión. Puede también que, de existir, quepa en una caja de cerillas. O, tal vez, sea una carrera inacabable de infinitos obstáculos. A lo mejor, nos empeñamos en sustituirla por el dinero, por el poder, y, hasta los más resignados, por la salud y el trabajo. Sin embargo, como asnos tras la zanahoria, todos pasamos la vida en pos de su señuelo. Tan empeñados estamos con la felicidad, que algunos han ideado otra vida donde conseguirla. Qué obsesión, qué brutos nos ponemos. Y a lo tonto.

Buscando amparo

Envueltos o liados o confundidos por estos marasmos de banderas, y no sabiendo nunca si lo que representan nos amenaza, nos protege o nos explota,  no viene mal la ayuda de los cielos. Así que, carente de toda garantía, conviene al creyente y también, por si acaso, al que no lo sea, ponerse bajo el símbolo de alguna entidad no terrenal que vele por los desamparados, porque todos somos candidatos a serlo y muchos ya lo son. Y es que la sombra de tanta bandera apabulla, ensombrece el corazón y casi asusta.

Por favor, primero las señoras, luego el talento

Aquel ministro Cañete que afrontó la crisis de las vacas locas en el 2000-01, metiéndose entre pecho y espalda un solomillo aquí, un chulentón allá, al estilo de Pedro Picapiedra, va a representarnos en Europa.
Pero, a tenor de sus últimas declaraciones, no le veo muy fino. Espero que todo el potencial intelectual que renuncia a utilizar para no apabullar a las señoras, lo utilice sin complejos en la sutil Europa y, aunque le cueste, no se corte con la indefensa señora Merkel por esa su paternal cortesía con las débiles damas.
Cachis, con lo puesto que estaba en agricultura.

15 de mayo de 2014

Al servicio de los hombres

Algunos dicen que el nombre Emilio procede del latín “aemilius” que significa “el que se esfuerza en el trabajo”; otros sostienen que se deriva del griego “aimilios” cuya traducción sería “amable”. Sin embargo, pese a las gracias derivadas de su nombre, todos los Emilios del santoral fueron martirizados.
Y, digo yo, si este Emilio, que también cumple las condiciones de trabajador y amable, como reza la carrocería de su negocio móvil, no será otro mártir desconocido y perdido por el mundo, que hubiera merecido la canonización junto a ambos Papas. A mí me parece que tiene toda la pinta.

Un banco sin interés

Entre los miles de construcciones y paseos que hay en las costas, encontré una mañana este banco. Y me dije: este es el banco de pensar.
-        Oiga, ¿le apetecería sentarse a pensar en este banco?
-        ¿Pensar? ¡Qué aburrimiento! ¿Cree que no tengo otra cosa que hacer?
-        Pero,  ¿le parece mal pensar un rato?
-        Pensar en qué.
-        Pues, preguntarse por la vida.
-        Yo no tengo nada que preguntarme.
-        Entonces, ¿es usted feliz?
-        Ni feliz, ni infeliz, estoy acostumbrado. Y si me falta tiempo para padecer la mayoría de las cosas, no sé de dónde lo iba a sacar para arreglarlas.

Bucles

Hay algunas frases sin principio ni fin, tan falsas como ciertas, que no se cumplen pero que no dejan de realizarse a cada instante. Frases con la misma vigencia hoy que hace mil años y que seguirán valiendo dentro de otros mil. No hace falta mudar las palabras para que algunas frases tengan movimiento constante, como si perennemente estuvieran rodando. Sentencias que vaticinan el tsunami definitivo pero que predicen simplemente olas que mojan los pies a cada generación, una tras de otra. Y solamente terminan siendo ciertas para cada persona, individualmente, en cada nuevo e ineludible amanecer.

14 de mayo de 2014

Las amigas

Con ese sentido tan romántico, con esa ensoñación, de que perduramos como fuimos, las amigas quieren reunirse cuarenta años después. Y, tal vez, piensen continuar hablando del interés común que tenían entonces: el ansia de vivir.
Pero, si se juntan, probablemente terminarán hablando de otras cosas.
Me pregunto cuánta ilusión conservarán sus ojos,  y si la vida habrá llevado a cada una al puerto imaginado o si el azar ingobernable y los vientos caprichosos les habrán llevado a playas remotas, a islas desiertas o a acantilados ásperos que nunca pensaron visitar.
A mí me gustaría recordarlas tan alegres como eran.

El muro

Arreglaron la casa vieja de la huerta. Y lo mismo que dieron libertad a los frutales, dejaron asomar la cara al tapial viejo. Porque el pasado, con un revoque nuevo, cambia la identidad o la destruye o regala otra sosa y sin sustancia. Maquillado el muro original de blancura, se asusta al tiempo que, obstinado, queda siempre debajo sin poder dar la cara. Pero aquí le dejaron respirar con su pulmón de barro. Y los ladrillos toscos y las piedras de río sonrieron, sacudiéndose el blanco como un perro garabito se sacude el barro al salir de una charca.

7 de mayo de 2014

Ponga a su bebé un bonito nombre de diablo

Aamón, Abam, Abbadón, Abigor, Adirael, Adramelech, Ahpuch, Ahrimán, Amón, Ananel, Andija, Andras, Amudiel, Araxiel, Asbeel, Asderel, Asmodeo, Astaroth, Ayacuá, Ayperos, Azazel, Baalberith, Badariel, Balaam, Balbán, Baphomet, Bast, Behemoth, Beherit, Belcebú, Belial, Bile, Bu, Cachano, Camuñas, Cancón, Chamuco, Chemost, Cimeries,  Damballa, Damian, Dagón, Demogorgón, Demontre, Diábolus, Diantre, Diaño, Dracu, Enmao, Eurónymus, Fenriz, Gorgo, Haborym, Huerco, Ishtar, Lilith, Lucifer, Luzbel, Mammón, Marduk, Mastema, Mefistófeles, Meibonio, Melektaus, Mengue, Metztli, Metatrón, Mictián, Midgard, Milcom, Moloch, Mormo, Naamah, Nergal, Nihasa, Nija, Oyama, Papón, Pateta, Páticus, Rimmón, Sabazios, Saitán, Sammael, Samnu, Sarhaolam, Satán, Satanás, Sedit, Sekhmet, Semyazza, Shaitán, Supay, Tchort, Tezcatlipoca, Thamuz, Toth, Tunrida, Typhón, Yaotzín.

(Sólo se ofrecen nombres sofisticados que puedan marcar tendencia. No se incluyen los más castizos por su vulgaridad: Pedro Botero, Cojuelo, Ángel Caído, Anticristo, Diablo, Tentador, Trompetero de Judas, etc.)

6 de mayo de 2014

Historias del telediario

Parece mentira pero es así. El dueño de un bar ha sido condenado a más de dos años de cárcel por molestar con los ruidos de su establecimiento.
A la madre del condenado le parece una vergüenza:
“Mire usted, cuando mi hijo esté en la cárcel y entre los reclusos se pregunten cuál es su delito,  dirán:
-        Yo estoy aquí por violador.
-        Yo, porque robé.
-        Yo, porque maté.
-        Yo, por traficante de armas.
-        Yo, por drogas.
-        Yo, por un ERE.
-        Yo, por corrupto.
Y mi pobre hijo, avergonzado, tendrá que decir:
-        Yo, por poner demasiado alto Paquito el Chocolatero.”

5 de mayo de 2014

Mirar sin ver

Caminando a gatas, como un gozquecillo humano, memoricé los primeros recuerdos. Entonces, el mundo material me parecía abstracto: formas sin sentido con las que tropezaba. A mi ritmo hice mi propio plagio intelectual de todo, gracias a personas que, enseñándome, no se tenían por docentes. Y, como en nada fracasaron, todo cuanto me rodeaba se me hizo conocido, y aprendí sin notarlo. Curiosamente, jamás volvió a ser así, ni el colegio ni después. Nunca volví a dar con maestros tan naturales y tan diestros. Hoy me pregunto si enseñar no será, simplemente, resolver los problemas de cualquier aprendizaje. Sin alardes.