13 de febrero de 2012

Escépticos


En la fe, creencia ciega en algo, no cabe la posibilidad de la equivocación; en la ciencia, que intenta explicar las leyes que rigen el mundo, sí. Los fieles son escépticos hacia la ciencia; los científicos lo son hacia la fe. La voluntad de Dios es la explicación de todo para los primeros y, su voluntad cambiante, explica los fenómenos inexplicables y contradictorios. Mientras, para los científicos, la paulatina explicación de los fenómenos por los descubrimientos de la ciencia demuestra que Dios es un mito.
Y a ti, ¿qué es lo que te gusta pensar?

8 comentarios:

matrioska_verde dijo...

yo fui creyente, aunque nunca tuve una fe ciega, en mi creencia había muchas lagunas... y un día (bueno, fue progresivamente) mi fe se desvaneció por completo y dejé de creer.

ahora creo en el hombre, en la buena energía que las personas nos dejan al morir, creo en mi fuerza de mi voluntad, en lo que puedo conseguir a través de la entrega a los demás, en mi familia (lo más más allegado), creo en los beneficios que nos aporta la naturaleza, creo en los animales...

y en el amor, lo más grande.

biquiños,

Paz Zeltia dijo...

que voluble Dios, (para ser Dios)

y respondiendo a la pregunta del texto,
a mí,
como gustar-gustar,
me gustaría hacerme un dios a mi medida y que me convenza.

Insumisa dijo...

¿Lo que me gusta pensar?
A ese respecto, básicamente mi pensamiento es bastante simple:
"Siempre habrá alguien super sabio y de buena voluntad que me obsequiará razonamientos respecto de lo que atenta contra las leyes naturales, y por supuesto, dará explicaciones largas y tendidas a todo lo que parece no tener lógica. Hasta me convencerá de cuanto argumente en pro del pensamiento científico. Y si no, pues entonces estaré en presencia de un milagro. Que es, según lo entiendo, territorio de Dios.

Besos en la chirimoya

Lan dijo...

Para haber dejado de creer, Aldabra, no está mal la colección de creencias que aportas.
Bicos.

Lan dijo...

Zeltia:
Si ni siquiera Dios puede ser voluble, vaya mierda de diosazgo, :-)
Ni que los dioses fueran los trajes de Camps, mujer. Que los dioses tienen que imponer un poquito y mandar algo, si no, qué sería del todopoderosismo. Dioses domesticados, no fastidies, lo que nos faltaba.

Lan dijo...

Muy bien, Insumisa. Qué sensatez. Eso es vivir con los pies en el suelo.
Besos a la recíproca.

Paz Zeltia dijo...

vas a tener razón...!

Lan dijo...

¡Qué sé yo, Zeltia!