Los ocres invaden el otoño y le
cambian el traje de domingo al verano por otro de faena. Y con las lluvias
aparecen esos seres de sabores untosos como gelatinas de las tripas del bosque
y, a veces, traidoramente venenosos, de deslumbrantes nombres latinos (Dónde va
a parar, de decir cagarria a Morchella Esculenta, es otro nivel). Y, como la
espora está de moda, se llena el campo los fines de semana de navajeros con
cestitas de mimbre que deambulan felices como Caperucita Roja, difunto el lobo.
Como sus navajas llevan cepillo, el navapillo va camino de la RAE.
22 de noviembre de 2014
Prodigio
Aunque no lo parezca, estás ahí.
Tan bonita y tan humilde, tan cerca de la tierra y del cielo, tan inesperada,
tan oculta, tan sencilla y tan dulce. Y nunca me canso de buscarte porque sé
que aparecerás como un milagro cotidiano. Y serás la misma que ayer, la misma
que hace años, idéntica a ti misma. Y sentiré la misma emoción al encontrarte
que se siente ante lo más inesperado, porque la suerte de ver la luz todos los
días es el mayor portento que sucede, aunque todos lo den por ordinario.
Páramo
En el páramo de Villacadima no
hay nadie. Es una alfombra de soledad para mí sólo. Busco mis pasos viejos. Doy
con ellos y en ellos me recreo. Camino seis horas sin dolor. Las angustias entrañables
ahogan al músculo. En las frondas camino sin rumbo. Y me pierdo, por si no me
sintiera suficientemente desvalido. Y pienso que no existo. Y, si los lobos o
el jabalí acabaran conmigo, quedaría disuelto en el paisaje. Y me doy cuenta de que
estoy muy cansado por dentro. El páramo es tan bello y tan triste como la vida que abrazamos.
24 de octubre de 2014
El residente
El viejo, como aquel coronel, no
tiene quien le escriba. Pero, lo peor, es que tampoco tiene quien le hable, ni
quien le escuche, ni quien le lea y, casi diría, que tampoco tiene quien le
mire. Bueno, le mira y le habla el personal del asilo, pero él sabe que son
miradas y palabras pagadas y, si alguna no lo fuera, tampoco tiene forma de
saberlo. Así que, cuando alguien le sonríe, nota que su última esperanza es la
mirada pues, con los años, intuye más verdad en los gestos que fe le queda en
las palabras.
La velocidad del deseo
Vivimos a espetaperros, odiamos
lo lento, amamos lo rápido y, desde Internet acá, sólo nos sirve lo inmediato.
Ir desempedrando calles con el huracán fulminante que todo lo atropella es lo
nuestro. Ha quedado viejo eso de “el tiempo es dinero”; ahora, el tiempo, es
deseo. Vivir a la velocidad del deseo es algo así como viajar a la velocidad de
la luz. Toda una meta. Aunque, tal vez, tal velocidad no nos dé tiempo a
plantearnos lo que hacemos, ni adónde vamos. ¿Qué más da? Seamos felices. Vivir
rápido y morir en urgencias, sería un buen lema.
Casi feliz
En mi nueva profesión de
azotacalles, cotidianamente desempeño con dedicación y humildad mis funciones:
soy fiel al PP (pan y periódico), corredor de bolsa (de la compra), aviador de
vocación tardía (aviando la casa lo justito), consultor (de recetas culinarias),
experto en el corte (inglés), oficial de abastos, gestor de asuntos propios y
ajenos, experto en logística y mensajería y hasta soporto el peso de la
decoración. Y, me digo, eres una persona normal, adocenada, conforme con tu
edad. Y, sin embargo, no me resigno a la continua mohatra del gobierno en la
venta diaria de sus esperpénticas aranas triunfalistas.
18 de octubre de 2014
El orgullo y la geografía
-
Sí, señor. ¡Soy español! ¿Qué pasa?
Camino a casa,
con el frescor de la noche, se disiparon algo los efectos etílicos. Y, dejando
atrás honrosos vericuetos raciales, devaneó su mente con las ideas simples,
ajenas al ridículo, y se acogió al sedante sentido del humor: “Claro, soy
español, nací en España. Y, lo triste, es que, aunque quisiera, no podría dejar
de serlo. De modo que al final, aunque me pese, soy español porque no puedo ser
otra cosa.”
-
Y a ese qué le pasa –dijo uno al verle pasar.
-
Nada, que hoy la ha cogido risueña.
Entretenidos
Si la realidad está constituida
por los hechos y no por los deseos, si admitimos que el poder está capacitado
para decidir en que hemos de emplear nuestro dinero, si consideramos que la
corrupción consigue que el poder sufrague gastos y fortunas y si pensamos que
la inteligencia es la capacidad de adaptarse a lo que venga, supongo que vivimos
en una sociedad inteligente y realista porque vivimos adaptados al poder y a
sus secuelas.
-
Sí, pero nuestra voluntad puede cambiarla.
-
Para mantenernos en esa ilusión, tenemos esa
vieja muletilla: “La justicia es igual para todos”.
11 de octubre de 2014
Los proactivos
El otro día por la tele uno de
esos señores importantes, que trabajan en el Ministerio de Sanidad, dijo que
iban a ser especialmente pro activos, o proactivos, en las medidas para
combatir el ébola. El saber que el ministerio va a estar en favor de la actividad
ante esta enfermedad me llenó de tranquilidad.
Sin embargo, pasado un rato, me
dije si es que antes estaban pasivos, o pro pasivos, o propasivos y pensé que
solamente habían usado una expresión nueva o poco frecuente, pero que seguirían
como siempre, y, además, propasándose también en el uso del lenguaje.
La hermana paciencia
La globalización hace mundiales
los problemas locales. Y, aunque los poderes reales ponen coto a cuanto no les
interesa, los virus escapan aún a su control. Sin embargo, los virus,
trabajando gratis y con movilidad laboral, son también partidarios de la
globalización y gustan, como esos poderes, de colonizar cuanto pillan y además,
siendo insignificantes e irracionales, actúan con mayor efectividad que las
grandes corporaciones. Ante esta globalización biológica, nos quieren tranquilizar con protocolos
que, al parecer, nadie respeta. Y la gente les observamos, como siempre, con
paciencia, esa sempiterna hermana. Porque, estando mal, podemos acostumbrarnos
a estar peor.
4 de octubre de 2014
Torrente 5, piqué.
So pretexto de hacer una metáfora
de los vicios nacionales, se estrenó ayer el quinto episodio de Torrente. En mi
opinión, visto el primer episodio de la saga, vistos todos. Que tantas personas,
incluso críticos, promocionen este quinto Torrente, produce la triste impresión
de que, considerándonos acostumbrados a los escándalos diarios, piensan que no
nos importará contribuir, en este caso voluntariamente, a la avidez monetaria
del amiguete Segura, así, en plan coleguitas. Menudo bodrio, no sé cómo los hay
con tanta jeta. Menos mal que en el cine, al contrario que en la vida, tragarse
una vergüenza es cosa voluntaria.
1 de octubre de 2014
La irrealidad de la noche
Confiaban los ciudadanos en la
sempiterna sucesión de los días y las noches. Mas hubieron de desengañarse,
como de tantas cosas tenidas por evidentes e inmutables, cuando un día los
políticos les revelaron que no había noches, sino que la Tierra, al girar, les
sumía en lo que propiamente eran eclipses de sol autogenerados de duración
variable y que, por tanto, eran los ciudadanos los que, también en este caso,
como en tantos, estaban confundidos y ofuscados. Y es que lo real es tan etéreo
que no está, estará ni estuvo nunca, más que al alcance de algunos seres
superiores.
28 de septiembre de 2014
Antisistema
El partido opositor le dijo al
partido gobernante:
-
Deseo que tu política fracase para que los ciudadanos
me voten a mí.
-
¿Y cómo gobernarás tú?
-
Igual que tú.
-
¿Entonces?
-
La idea es que tú caigas, sin yo hacer nada, y que, sin
hacer nada, me pongan en tu lugar.
-
Pero, pasado un tiempo, a ti te sucederá lo mismo.
-
Claro, y entonces volverás a gobernar tú.
-
¿Creerán en ese juego los ciudadanos?
-
Sí, siempre que, públicamente, sigamos insultándonos.
Tanto les apasionaremos, que nos levantarán alternativamente siempre que
caigamos.
-
Pero, ¿y si surge otro partido?
-
Intolerable. Eso sería una subversión antisistema.
Me mata la duda
Podados en España aquellos
inoportunos brotecillos de la justicia universal y olvidada la machacona
retahíla esa de los derechos humanos y otras menudencias, se ha ido don Mariano
a la China comunista a hacer negocios. Sumiso ante un régimen tan democrático y
humano, les ha abierto un país de grandes ocasiones, el nuestro, para la
inversión, garantizándoles que no verán la luz esos odiosos y molestos contenciosos
contra los prebostes de la gran potencia. Y luego se oye por ahí que los de
Podemos son bolivarianos. ¿A ver si, a estas alturas, nos va a salir un PP
filocomunista?
19 de septiembre de 2014
Adiós mi España querida
Se puede querer a un tonto por humanidad,
pero a un bruto se le desprecia por la
misma razón. No sé si mi país es maliciosamente bruto y medio tonto.
Cuando muchos jóvenes se van,
decepcionados por una nación que parece no necesitarles o, tal vez, animados
por ese espíritu aventurero laboral y cultural que alaba alguna ministra, me
pregunto qué sentirán hacia España.
Imagino que, desde fuera, guardarán hacia
su patria el cariño que, por ser de ley, se le tiene a un hijo tonto, o el amor
incondicional que profesamos a aquella primera novia, aunque nos saliera puta.
3 de septiembre de 2014
Spanish brand
-
En España no se nota la pobreza.
-
Pues la hay, aunque no abunde aún la miseria.
-
¿De dónde es usted?
-
Soy español.
-
¿De verdad? –y los holandeses se miran extrañados de
que esté en su mismo camping y de que me defienda en inglés.
-
¿Jubilado, tal vez? – preguntan con ironía.
-
Sí, en España después de cotizar 41 años aún podemos
jubilarnos.
Los holandeses
me desean un buen día y se van sonriendo, escépticamente, pensando que el único
español que hay en este humilde camping del interior de Castilla, repleto de extranjeros, les está
mintiendo. ¿Cómo no?
30 de agosto de 2014
Adiós, agosto amarillo
Quebrada como algunas piedras
quedó la vida de muchas personas por esos desarraigos prometedores a que obligó
el perjuro progreso. En Bilbao, en Barcelona, en Madrid, o vaya usted a saber dónde,
hubieron de buscarse un sucedáneo de la vida normal, que fue la que heredaron
de sus padres.
Ahora reverdecen en sus pueblos durante
esos agostos anuales en los que vuelven como cansadas aves migratorias y no es
extraño escuchar frases como ésta:
-Ya lo tengo yo hablao con la mujer. En cuanto faltemos uno de los dos,
yo me vengo al pueblo.
7 de julio de 2014
Intuición espiritual
-
De los mosquitos, lo que más me molesta es su sonido.
-
Claro, por eso les llaman trompeteros.
-
Y no comprendo como, si viven de picar y sorber sangre,
se delatan con ese zumbidito enervante. ¿No les basta con picar? ¿Han de
ponerte además de los nervios?
-
El zumbido no tiene que ver con su alimentación, sino
con su manera de anunciarse para buscar sexo.
-
Acabáramos. Ahora comprendo a esos adolescentes de mi
barrio que se pasan el día dando por saco con las motitos esas del escape
libre.
-
Gran comparación. Demuestra usted una gran intuición
espiritual.
La indisciplina del voto
La inesperada indisciplina del
votante ha movido ese tú y yo, sillón del bipartidismo. Algunos pasajeros
desdeñan ese tren, con una locomotora en cada extremo, que, por idéntica
dirección, les cambia alternativamente de sentido. Con vaivenes tan sobados, es
difícil cambiar de sitio. Y, bastantes, están hastiados de tanto zarandeo.
Andan mirando si, con maquinistas
nuevos, se olvidará el asunto. Pero me temo que lo denigrante son los viejos usos,
el trayecto obligado, las paradas imprevistas, las vías muertas, las demoras,
los abusos, las trampas. Y dudo de que, simplemente con jóvenes semblantes, vayan
a conformarse esos usuarios tan escarmentados.
6 de julio de 2014
¿Para cuándo la mendicidad?
Palabras como pobre, mendigo y
pordiosero no son sinónimas. Para empezar, pertenecer al primer grupo no
requiere pedir. Mendigos y pordioseros piden. El mendigo pide limosna y el
pordiosero la implora por Dios. En un país serio como el nuestro no se puede ignorar
esta obviedad y no parece responsable que tales actividades no contribuyan a
elevar nuestro PIB. Si ya hemos incorporado a él los ingresos por prostitución
y drogas, a qué esperamos para incluir la mendicidad. Por favor, un poco de
coherencia, seamos un país serio. La mendicidad es otra fuente de riqueza. ¿O
es que estamos ciegos?
ABC de la justicia
No os empecinéis en la justicia.
La justicia, igualitaria y rigurosa, es fuente de ciudadanos ofendidos. Porque
de esta justicia, como idea, todos son partidarios, pero su aplicación
individual a todos disgusta. Lo estamos viendo. Seamos realistas y adaptemos la
justicia a cada cual, al rey lo del rey, y, del rey abajo, lo mismo con los
demás.
Ya lo dijo Ulpiano, que veía
venir las cosas: "La
justicia es la constante y perpetua voluntad de dar a cada uno su derecho".
Pues nada, que nos empeñamos en enmendarle la plana. ¡Qué calvario, mon Dieu!
¡Cuánto daño hizo la Revolución Francesa!
Cursos de verano
Ya no hay partido político sin su
curso de verano. Todos ellos presentan algún líder joven. Olvidando la campanuda
responsabilidad de estado, idílica característica del bipartidismo asentado, todos
se han lanzado en tromba a la piscina estival de los proyectos. Quieren regenerarnos
de sus propias vergüenzas. Al ciudadano le pillan por sorpresa esta legión de
socorristas y casi le asustan. ¿Conseguirá este despliegue de celo alguna
cosilla?
La idea se utilizó hace más de 30
años para reciclar a los profesionales de la educación y, al poco tiempo, las
escuelas de verano pasaron de ser promocionadas a proscritas. ¡Menudo peligro!
15 de junio de 2014
Marca España
Cuando se levantó y apenas notó
los efectos de la resaca, se encontró con fuerzas para el cambio. Decidió no aplacar sus nervios con la
violencia habitual. Cancelaría la partida. Apagó la pantalla del ordenador
donde los malvados nazis y sus engendros del “Return to castle Wolfenstein” le
esperaban.
Conectó la tele justo tras el
penalti: ¡Marcaaaaaaa Españaaaaaaa!
Luego vinieron los cinco goles de
los otrora nuestros Países Bajos. Su ilusión por el cambio se frustró y volvió
al refugio de Wolfenstein.
Si caíamos ante Chile, caeríamos ante
un país hermano y no ante un promotor de la Leyenda Negra.
28 de mayo de 2014
Ausencia
Al amigo no tiene sentido alabarle
antes ni después de muerto. Del amigo desaparecido queda el recuerdo de su
constancia en el afecto. Un desequilibrio en la palanca que tantas veces nos
ayudó a equilibrar la vida. Un apoyo al que ya no podremos recurrir, aunque,
inconscientemente, no queramos hacernos a la idea. Y durante muchas semanas nos
sorprenderemos pensando en ir a verle, como solíamos, a contarle nuestras cosas
y a escuchar las suyas. Tendremos ese impulso a menudo para, al momento,
pararnos en seco y recordarnos a nosotros mismos: ya no está. Pero, aún así,
nos dolerá creerlo.
Podemos
Hace más de treinta años mi
comunidad plantó un naranjo que inicialmente todos cuidamos con esmero. Pero
pronto delegamos su cuidado en administradores y éstos en multitud de
jardineros. Mas, ante la confianza del vecindario, jardineros y administradores
se volvieron cada vez más descuidados, venales y soberbios. Y, sin cuidarlo,
daban por sentado que el árbol era suyo.
Así, lo invadieron pulgones, proliferaron en él bacterias y tumores, y
el Virus de la Tristeza lo defoliaba y dejaba sin frutos. Un día algunos
vecinos decidieron afrontar la situación y se dijeron: “No hay más remedio, si
hay que podar, podemos.”
19 de mayo de 2014
Alegría, que no es un sufragio de difuntos
Elegimos al gobierno por
sufragio, luego le sufragamos sus gastos y hasta, frecuentemente, le hacemos
los deberes, porque el gobierno ha de estar a lo de la macroeconomía y no a
trivialidades rastreras que afecten al día a día de los ciudadanos. El gobierno
resolverá el futuro, que el presente es cosa nuestra y, además, no tiene arreglo.
De la herencia recibida hemos de pedir
cuentas al gobierno anterior, que a este gobierno ya tendremos tiempo de
agradecerle lo mucho que está haciendo por nosotros. El presente ya lo hemos
perdido, ahora vamos a jugarnos el futuro. ¡Con alegría, coño!
El círculo virtuoso
Creo que hay situaciones que son ollas
a presión de comportamiento impredecible. Mezclas de poder, ambición, intereses
propios y ajenos, dinero, favores, amenazas, despotismo, desprecio, odio,
estructuras públicas corruptas, política, armas, negocios, lumpen, gente
atildada y elegantes salones. El asesinato se rehuye, bien sea por negocio o
venganza, pero su sombra está. Siempre creí que las personas de bien no
entraban en estos círculos viciosos pues, por definición, nacen o, al menos, viven
abonadas a círculos virtuosos, pero creo que la separación entre unos y otros
es muy tenue. Eso pensaba anoche, cuando volví a ver El Padrino.
17 de mayo de 2014
Hood no, pero Look sí
El Ministerio de Hacienda español
ha recibido diplomáticas indicaciones por parte de la UE para que sus
inspectores visiten esta óptica. No pretenden las autoridades comunitarias la
utopía de que estos amables funcionarios sisen a los ricos en favor de los
pobres, pues eso contravendría el espíritu de la mayor parte de las directrices
comunitarias. No quieren que sean como Robin Hood, que ya se sabe que era un
proscrito, sino que, contagiados del nuevo espíritu Robin Look, miren y
detecten los grandes fraudes y evasiones fiscales. Por una administración
escandalosamente económica: Help us Robin Look!
No empecinarse
La felicidad está rodeada de
alambradas. Puede que, además, sea sólo un deseo o una ilusión. Puede también
que, de existir, quepa en una caja de cerillas. O, tal vez, sea una carrera
inacabable de infinitos obstáculos. A lo mejor, nos empeñamos en sustituirla
por el dinero, por el poder, y, hasta los más resignados, por la salud y el
trabajo. Sin embargo, como asnos tras la zanahoria, todos pasamos la vida en
pos de su señuelo. Tan empeñados estamos con la felicidad, que algunos han
ideado otra vida donde conseguirla. Qué obsesión, qué brutos nos ponemos. Y a lo
tonto.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)